Caligrafía latina
Desde los tiempos de los romanos y hasta la invención de la imprenta, la caligrafía ha estado ligada a la historia de la cultura europea. Los romanos, a golpe de cincel, esculpían sobre piedra las elegantes letras capitales, en un alfabeto que constaba únicamente de las que hoy llamamos letras mayúsculas, y cuyas hermosas proporciones las han hecho llegar casi sin cambios hasta nuestros días. De hecho, la omnipresente tipografía “Times New Roman” de los ordenadores deriva directamente de las letras romanas, como su nombre da claramente a entender.
También escribían sobre rollos de papiro, y posteriormente sobre pergamino, bien imitando la letra capital romana (cuyos apéndices en los extremos de los trazos eran hechos en la piedra para “cerrar” cada uno de estos y así evitar que la roca se agrietase más allá del final del trazo), o bien en una forma similar pero más simplificada y adaptada al material de soporte denominada “Rústica”.
Para documentos más informales, los romanos usaban las letras cursivas, que a lo largo de los siglos acabarían convirtiéndose en nuestras letras minúsculas.
2 comentarios:
Hola es gabriela de venezuela deberian colocar solo el concepto de la importancia de la caligrafia latina eso es lo que le intereza a la gente
yeah!
Publicar un comentario